martes, 16 de febrero de 2010

Presente en la UAN ministro en retiro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación

Tepic, Nayarit, 15 de febrero de 2010.-

En acto solemne, el rector de la Universidad Autónoma de Nayarit, Omar Wicab Gutiérrez, declaró inaugurada la Maestría en Derecho que ofrece la Unidad Académica de Derecho, ante la presencia del director de dicho plantel, Salvador Madrigal Martínez, y el ministro en retiro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Genaro David Góngora Pimentel.

En dicho evento, celebrado en el auditorio de la Biblioteca Magna de la Universidad Autónoma de Nayarit, se contó también con la presencia de funcionarios, docentes y estudiantes de nuestra Institución, así como integrantes del Poder Judicial Local y Federal.

Omar Wicab expresó su felicitación a los académicos de la UAD por el arranque de esta Maestría, así como por el ingreso del Doctorado Interinstitucional en Derecho al Programa Nacional de Posgrados de Calidad (PNP), y con este aliciente, seguir formando una masa crítica que es muy necesaria en el estado y la región, por la urgencia que existe por seguir mejorando el perfil de los académicos y de los egresados en Derecho de la región.

Por su parte, el director de la Unidad Académica de Derecho destacó que en la UAD, están concientes de la necedad de desarrollar la investigación y la capacitación de los profesionales de esta área, como un elemento de formación y progreso, por ello se han ocupado en impulsar e implementar programas de posgrado.

“Al inaugurar esta maestría, estamos dando un gran paso hacía la excelencia, a favor de la sociedad al brindarle a los profesionales del derecho de Nayarit, la oportunidad de prepararse en un nivel académico de una maestría”.

Explicó que el programa que hoy inicia, fue diseñado con esmero por un grupo de los mejores docentes de la UAD y con el apoyo de la Secretaría de Investigación y Posgrado de la UAN, con el estímulo del rector de la UAN; por ello que tiene como finalidad, impulsar el conocimiento jurídico, mediante la investigación y la profesionalización, en relación a cuatro orientaciones terminales que conforman este programa: El derecho constitucional y administrativo, el derecho penal, el civil, el mercantil y el amparo.


Finalizó agregando que es fundamental la integración de valores y principios éticos y morales, puesto que consideró, que los problemas sociales no se combaten sólo con leyes o el perfeccionamiento de las mismas, sino que se requieren de cualidades que además de una formación académica tengan un profundo sentido humanista.

Posterior a la ceremonia de inauguración, el ministro en retiro Genero Góngora, dictó la conferencia magistral “Después de los estudios de la carrera en Derecho, ¿Qué sigue?”, misma que se suscitó entre los presentes con gran aceptación.
“La primera hipótesis que se tiene en general es que saliendo de las aulas de la escuela y recibiendo el título y la cédula profesional, el abogado ha terminado sus estudios; pero la realidad, no es así, hay cursos de actualización, maestrías, estudios especializados, los cuales son importantes para mantenernos al corriente en el desenvolvimiento, para que podamos tener el mínimo de conocimiento para que podamos ejercer nuestra profesión”.

Agrega que los jóvenes inician otra parte de sus estudios cuando egresan su carrera, ya que una vez que se integren a un despacho de abogados habrán de responder ante algunos de los socios, que calificarán sus escritos legales con el mismo detalle en que lo hicieron sus profesores.

Señala que lo que se aprende en la escuela es una metodología, y no es, sino hasta que se ha sido sometido, al estímulo de las motivaciones humanas en todas sus complejas fórmulas y formas, y hasta que se ha obtenido la agudeza de ingenio que afila la percepción y el juicio, cuando podrán considerarse aptos para ser abogados litigantes o decidir juicios e impartir justicia.

“El símbolo de la ley no es una estatua fría de mármol, sino que es un organismo viviente, constantemente creciendo y cambiando de forma, el cual, ustedes ayudarán a configurarlo y dirigir su crecimiento, a todo esto, siempre esperando encontrar una mejor palabra, la cual se llama “experiencia”.

Finalizó deseando a los presentes, que se conviertan en grandes abogados, litigantes, funcionarios y jueces, para que tengan el aprecio y la confianza de sus clientes y el respeto de la comunidad a la que sirven.

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